viernes, 18 de enero de 2013

Contra la autoayuda: Quitarse de enmedio los amigos que hizo con el método Carnegie

como ganar amigos e influir sobre las personas (3ª ed.)-dale carnegie-9788435017503Lógicamente los informáticos que nos dedicamos a las soluciones de gestión tenemos que tratar a menudo con problemas de organización. Es más, es casi el principal objetivo de nuestro trabajo: organizar.

Algunos informáticos se quejan del intrusismo, aquello de que el empresario tiene un sobrino que sabe mucho de informática. De eso hablaré otro día.  Hoy voy a ir a un problema que me preocupa más. Las soluciones de los libros de autoayuda. Como con los sobrinos, hay buenos y malas, pero por lo general suelen ser más un estorbo que una ayuda.  Antes de hacer una crítica general de ellos, cosa que dejo para otro artículo, me voy a permitir discutir algunos en particular.  Así, iremos de lo particular a lo general.  

Históricamente el libro más famoso contra la autoayuda es Don Quijote de la Mancha, pero aún no me siento capaz de emular a Cervantes, así que haré algunas reseñas concretas, más humildemente.

El libro de hoy es de Dale Carnegie, en concreto Cómo ganar amigos. Ha sido un best-seller, tan best-seller que ha vendido, según la portada de la edición que tengo (bastante antigua), más de 22 millones de libros. Por las referencias que conozco, se dice que es una maravilla, el no-va-más de las relaciones humanas. Aunque este libro es posiblemente el más conocido, Carnegie tiene algunas obras más en la misma línea. El texto que sigue está tomando en su mayoría del que escribí hace mucho tiempo para otra web: www.granadacultural.info 

La verdad es que cuando leí Cómo ganar amigos pensé que una forma de hacer dinero sería editar otro libro que se titulara 'Cómo desembarazarse de los amigos que ganó con el método Carnegie'. De todas formas, una vez meditado el tema y dado el éxito del libro de Carnegie, creo que el mío no tendría las mismas ventas, aunque su objetivo sea más práctico e interesante que el original.

El libro da las recetas para ser un triunfador, el número uno en lo que se quiera ser, vivir bien, y, bueno, esas cosas que se denominan 'éxito social'. Precisamente en la época en la que leí el libro vi unos minutos de un programa de televisión que se llamaba 'Buscados con cargo' o algo parecido. Trataba de un señor que había estafado a un montón de gente. Entrevistaba a una de las víctimas y cuando habló de cómo era el fugado: «muy atento, se interesaba por tu familia, te dejaba hablar,...» he aquí que reconocí la historia. Sí, sin lugar a duda, el estafador había leído y empleaba el método Carnegie.

Bueno, y ahora, después de esta introducción vamos a hablar un poco más serio sobre el tema. Nos centramos en el libro citado.

El objetivo del libro está más o menos definido por su título y las siguientes leyendas que aparecen en la portada:

1.-¿Cuáles son las seis maneras de gustar a la gente?
2.-¿Cuáles son las doce manera de hacer que los demás piensen como usted?
3.-¿Cuáles son las nueve maneras de cambiar a los demás sin ofenderlos ni causar resentimientos?


Si leemos un poco más vemos que efectivamente el libro va orientado a hacer triunfar a 
sus lectores, a qué consigan lo que quieran en los negocios y en la vida sentimental.  Está lleno de ejemplos de casos que se suponen reales. La mayoría son éxitos de 'grandes hombres', 'vendedores que vendieron' y 'matrimonios que se arreglaron'.

El autor dice que su método ha sido simple. Ha leído un montón de biografías de 'triunfadores' y ha estudiado cómo consiguieron el triunfo. El método parece bueno. Me recuerda a Gibbon: Leyó y comprendió todos los escritos sobre la caída del Imperio Romano para escribir su gran obra sobre el tema. Pero aquí empiezan mis diferencias. ¿Quienes son los triunfadores?. Bueno, pues parece que los mayores triunfadores son ... ¡los presidentes de los Estados Unidos!. Desde luego no me imagino queriendo seguir los pasos de Ronald Reagan, George Bush o Bill Clinton, por citar los presidentes más recientes y por lo tanto los que más he sufrido. A mi no me parecen ejemplos a seguir, ni triunfadores. Más bien son déspotas y enemigos de mis ideas. El planteamiento de Carnegie se me antoja similar al hecho de que alguien me quisiera vender un curso de gimnasia con el argumento de 'Así conseguirá ser cómo la élite de la raza aria'. Me daría náusea, simplemente.

No digamos de la vida matrimonial que se adivina en los ejemplos. Parece un reflejo de los tópicos habituales: Quítale pasión, originalidad, libertad y algunas cosas más y sale el matrimonio que se alaba en el libro.

O sea, Carnegie y yo partimos de planteamientos distintos. Sus objetivos no son mis objetivos. Su triunfo, su reconocimiento social, su vivir mejor, me resultan discutibles e incluso indeseables en muchos aspectos.

Pero no todo es malo. Pese al mal planteamiento anterior creo que muchas de las recetas que figuran en el libro pueden ayudar a que la gente se relacione mejor. Hay ideas básicas que compartimos: Debe tratarse bien a la gente, se les debe respetar, es preferible la negociación al enfrentamiento violento,... En suma, una parte del método me parece aprovechable si se hace las salvedades que he mencionado sobre lo objetivos iniciales, se analizan críticamente las cosas y se añaden algunas reservas más cómo la que paso a comentar en los siguientes párrafos.

Creo que para que el método funcione a la perfección hace falta un tipo concreto de gente. Tanto en el usuario del método como en 'los amigos que va a ganar'. Se encasilla al pensamiento humano de una forma que creo que puede ser cierta para muchos pero no para todos. Y esas excepciones pueden a veces ser las más interesantes. Pueden ser los amigos que de verdad quisiéramos tener. Me explico un poco mejor. Habla de personas con unas preocupaciones concretas: dinero, éxito, reconocimiento social,... En gran medida es verdad la universalidad de estas preocupaciones (más de lo que creeen muchos utópicos ficticios), pero no en toda medida. Además evita una de las mejores cualidades del ser humano: el ser crítico. En el prólogo leí que se habían modificado en la edición presente algunos detalles para corregir 'la orientación excesivamente masculina del libro'. Es un ejemplo de lo que quiero decir. Como el mundo es machista, pues el libro también y no se da cuenta hasta que cambia el mundo de forma clara.

No me resisto a hacer algunos comentarios particulares sobre algunos detalles de la obra. Recuerdo con especial humor el capítulo en el que toma de ejemplo a Sócrates. Después de alabar lo convincente que era y de cómo conseguía las cosas con sus discursos, se olvidó mencionar un pequeño detalle que creo puede ser de interés para las enseñanzas del capítulo: Sócrates murió sentenciado a muerte después de uno de esos discursos en los que se negó a abdicar de sus ideas (justo lo contrario que enseña el libro). En ese momento le debió fallar el método Carnegie.

Bueno, después de todo, como ya he dicho anteriormente, las reglas del libro bien pueden ser aprovechable para muchas cosas. Así que procedo a dar un resumen de ellas.

La primera parte del libro se titula 'Técnicas fundamentales para tratar a los demás'. Comenta las siguientes reglas:

1.- No critique, no condene, ni se queje 
2.- Demuestre aprecio honrado y sincero 
3.- Despierte en los demás un deseo vehemente.

La segunda parte se titula 'Seis maneras de agradar a los demás'. Las reglas son las siguientes:
1.- Interesese sinceramente por los demás 
2.- Sonría 
3.- Recuerde que para toda persona, su nombre es el sonido más dulce e importante en cualquier idioma 
4.- Sea un buen oyente. Anime a los demás a que hablen de sí mismos. 
5.- Hable pensado en lo que le interesa a los demás 
6.- Haga que la otra persona se sienta importante y hágalo sinceramente.


El título de la tercera parte es 'Logre que los demás piensen cómo usted'. Estas son sus reglas:
1.- La única forma de salir ganando en una discusión es evitarla. 
2.- Demuestre respeto por las opiniones ajenas. Jamás diga a una persona que está equivocada 
3.- Si usted está equivocado, admítalo rápida y rotundamente 
4.- Empiece en forma amigable 
5.- Consiga que la otra persona diga 'Sí, sí' inmediatamente. 
6.- Permita que sea la otra persona quién hable más. 
7.- Permita que la otra persona sienta que la idea es de ella. 
8.- Trate honradamente de ver las cosas desde el punto de vista de la otra persona 
9.- Muestre simpatía por las ideas y deseos de la otra persona. 
10.- Apele a los motivos más nobles. 
11.- Dramatice sus ideas. 
12.- Lance un reto.

Por último, la cuarta parte se titula 'Sea un líder' y facilita la siguientes reglas:
1.- Empiece con elogio y aprecio sincero. 
2.- Llame la atención sobre los errores de los demás indirectamente. 
3.- Hable de sus propios errores antes de criticar los de los demás. 
4.- Haga preguntas en ver de dar órdenes. 
5.- Permita que la otra persona salve su propio prestigio. 
6.- Elogie el más pequeño progreso y, además, cada progreso. «Sea caluroso en su aprobación y generoso en sus elogios».